¿Sabías que el box se incluyó en el programa Olímpico en el año 668 A.C., y que es alrededor de este tiempo que se tiene registrado el primer uso de protección para las manos?
Los boxeadores olímpicos enredaban sus manos y muñecas en piel de diferentes animales.
El guante de box, pieza clave en este deporte, ha evolucionado con el tiempo y por supuesto, gracias a los polímeros, en la actualidad se cuenta con una tecnología de protección muy avanzada.
Esta tecnología consiste en una capa externa que puede ser de piel vacuna o de cabra, otros guantes utilizan cloruro de polivinilo (PVC) flexible o poliuretano (PU), lo que ofrece flexibilidad y durabilidad.
Junto a la capa externa viene adherido un refuerzo que por lo general puede ser tafeta de nylon (poliamida, PA). Esto va cosido con hilo de nylon (PA).
El acolchonado del guante es espuma de poliuretano (PU) de alta densidad.
Los guantes también pueden utilizar otros acolchonados de refuerzo, hechos de espuma de hule sintético, conocido como hule de estireno butadieno (SBR), espuma de PVC e inclusive capas de tela de algodón.
La primer función de los acolchonados es absorber la energía de compresión, entre mayor se comprime, mayor energía absorbe.
A nivel profesional es común diseñar el acolchonado del guante a la medida del boxeador, debido a que estos han llegado a reventar guantes por la fuerza de sus golpes.
El box, un deporte que se ve beneficiado con la existencia de los polímeros.
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