Una vez más los polímeros nos demuestran lo reciclables y versátiles que son.
A inicios del año pasado, el gigante minorista suizo Ikea, empezó a desarrollar una nueva línea de productos para el hogar hechos a partir de materiales de plástico reciclado.
Entre estos productos se encuentra una puerta para mueble de cocina, la Kungsbacka, la cual está hecha a partir de un compuesto de madera y plástico reciclado de botella de PET.
Otro producto es la Skrutt, la cual es una almohadilla de escritorio hecha de desperdicio de película plástica generadas de sus mismas tiendas en Italia y Francia.
Ikea también está lanzando la silla Odger, hecha con 70% de plástico y 30% de madera renovable.
Todo esto es resultado de innovación y ganas de hacer de este mundo, uno mejor.
Por otro lado, los plásticos demuestran todo lo que se puede hacer con ellos, más allá de tirarlos a la basura.
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